terça-feira, agosto 14, 2007

García Lorca


En su corazón hay una hoguera,
su fuego alimenta a los hambrientos,
el agua, por su calor, hierve.
Su diluvio purifica la tierra de maldades,
sus pupilas tejen una vela de llamas
uniendo con los husos de la lluvia
sus hilos, con unos ojos que chispean,
con los pechos de las madres al amamantar,
con cuchillos donde se derrama el sabor del fruto,
con los cuchillos de las matronas al cortar el cordón umbilical,
con los cuchillos de los invasores que muerden los rayos,
su vela húmeda como la luna,
su vela fuerte como las piedras,
su vela rápida cual mirada furtiva,
su vela verde cual primavera,
roja teñida de sangre,
se asemeja al barquito de un niño que al hacer pedazos el libro
llena con barquitos de papel el río.
Se diría que fuese la vela de Colón entre las olas.
Se diría que fuese el Hado.

Badr Shakir Al Sayyab (1926-1964),traduzido do Árabe por Carolina Fraile.

Este poema é do Iraque e foi retirado daqui

2 comentários:

Alien8 disse...

Belíssimo post, Wind.

Um beijo.

Special K disse...

Bem bonito realmente. beijinho